jueves, 3 de noviembre de 2011

EL PODER JUDICIAL DE ESTADOS UNIDOS POR ALEXANDRA MORENO


ALEXANDRA MORENO

EL PODER JUDICIAL DE ESTADOS UNIDOS

Es esencial entender bien el sistema judicial de nuestra nación para darse cuenta del rol que tienen los tribunales en la protección de los derechos civiles.

DOS SISTEMAS PARALELOS

Estados Unidos tiene dos sistemas judiciales separados: el sistema judicial federal y el sistema judicial estatal.
La Constitución de Estados Unidos autorizó al Congreso a crear un sistema judicial federal al que se le permite ver casos de los residentes de los diferentes estados y también casos que “surgen” de la Constitución o la ley federal. Toda ley o pacto aprobado por el Congreso se considera una “ley federal”.
Aparte del sistema judicial federal, cada estado tiene su propio sistema judicial estatal para decidir sobre los casos que conciernen a los residentes del estado y la ley estatal. Cada sistema judicial estatal tiene una organización distinta, pero la mayoría tiene muchos tribunales de primera instancia, autorizados para ver todo tipo de casos y luego un tribunal superior, cuyos dictámenes rigen para los otros tribunales en cuestiones de ley estatal.

EL SISTEMA JUDICIAL FEDERAL

Los tribunales distritales, o vías de entrada al sistema federal
Los tribunales distritales federales son tribunales de primera instancia del sistema federal. Estos tribunales distritales tienen jurisdicción para ver casi todas las categorías de casos federales, incluyendo asuntos civiles y también penales.
Existen 94 distritos judiciales federales, que abarcan por lo menos un distrito para cada estado. Cada distrito cuenta con un tribunal de bancarrota de Estados Unidos como una unidad del tribunal distrital. Las Islas Vírgenes, Guam, y las Islas Marianas del Norte tienen tribunales distritales para ver casos federales e incluso casos de bancarrota.
Si alguien tiene una disputa con un residente de otro estado o una disputa que tiene que ver con la Constitución o la ley federal, o si alguien ha cometido un acto delictivo federal, ese caso se verá inicialmente en el tribunal distrital más cercano al lugar donde viven. Hay muchos jueces de tribunales distritales federales que presiden juicios y dan fallos a este nivel. Aunque las opiniones de estos jueces son importantes en casos individuales, sus decisiones se pueden apelar ante el Tribunal de Apelación del Circuito. En una apelación, los abogados le piden al juez de un tribunal superior que revise el dictamen del juez de un tribunal de primera instancia.
Los tribunales de apelación, o el punto medio del sistema federal
Doce tribunales de apelación federales ven los casos de los 94 distritos federales. El tribunal de apelación no lleva a cabo juicios, sino más bien revisa los dictámenes de los tribunales distritales. El tribunal de apelación puede ordenar nuevos juicios a nivel de un tribunal inferior si encuentra problemas con el juicio de una de éstos. El tribunal de apelación recibe las apelaciones de todas los tribunales distritales ubicados dentro de su circuito, así como también recibe apelaciones de las decisiones de agencias administrativas federales.
El Tribunal de Apelación del Distrito de Columbia recibe las apelaciones que se provienen de Washington, D.C. y también tiene jurisdicción a nivel nacional para recibir apelaciones de casos de cierta especialidad, como aquellos que tienen que ver con la ley sobre patentes. Los otros once tribunales de apelación ven casos que se originan en sus propias áreas geográficas. Las opiniones de un tribunal de apelación rigen como ley en su área geográfica, y por ello los dictámenes de los tribunales de apelación son muy importantes para determinar cómo se va a aplicar la ley federal a los ciudadanos de cierta área. Aunque la Corte Suprema puede revocar los dictámenes de los tribunales de apelación, de los miles de casos que los tribunales de apelación ven cada año, la Corte Suprema solamente vuelve a decidir unos pocos.

 Los casos a nivel de apelación los ve generalmente un panel de tres jueces, y el voto mayoritario decide el caso. Cada circuito tiene un número distinto de jueces, que depende del número de casos sobre los que se les pide que decidan cada año. El Noveno Circuito, por ejemplo, ve los casos de la mayoría de distritos judiciales por lo que tiene la mayor cantidad de jueces.
Cada juez de un tribunal de apelación federal es nombrado de por vida por el presidente de Estados Unidos. Sin embargo, antes de convertirse en juez, cada nominado del Presidente debe ser confirmado por una mayoría de senadores, según lo exige la Constitución.

LA CORTE SUPREMA, O LA CUMBRE DEL SISTEMA FEDERAL
El tribunal de mayor instancia en Estados Unidos se llama la Corte Suprema de Estados Unidos. La Corte Suprema esta conformada por el Juez Presidente y ocho jueces asociados. Luego de que un tribunal de apelación da su opinión, una de las partes del caso puede recurrir a la Corte Suprema para pedirle que revise la decisión de tal tribunal de apelación. La Corte, a discreción propia, decide ver un número limitado de casos por decidir. Los casos tienen que ver generalmente con cuestiones importantes sobre la Constitución o la ley federal.
La Corte Suprema está considerada como el tribunal de mayor jerarquía en la nación ya que todos los otros tribunales federales deben acatar las decisiones de ésta, y esto incluye a los tribunales de apelación y los tribunales distritales.


EL DERECHO QUE SE APLICA EN ESTADOS UNIDOS

La Constitución de los Estados Unidos de América es la norma suprema del ordenamiento jurídico del país.
El Derecho de los Estados Unidos de América es un sistema que deriva en gran medida del Common Law (Derecho anglosajón) que estaba vigente en el Derecho de Inglaterra en la época de la Guerra de la Independencia.1 Actualmente la ley suprema del país es la Constitución de los Estados Unidos, y bajo el principio de supremacía constitucional, las leyes aprobadas por el Congreso y los tratados en que Estados Unidos de América sea parte, suponen el siguiente escalón de la jerarquía de fuentes del Derecho. Éstos forman la base para las leyes federales bajo la constitución federal en los Estados Unidos, estableciendo los límites de la legislación federal y de las leyes en los cincuenta estados y otros territorios del país.

FUENTES DEL DERECHO
En los Estados Unidos, el Derecho se deriva de cuatro fuentes: la Constitución, las leyes, los reglamentos, y el Common Law (en el cual también se incluye la jurisprudencia o case law). La fuente más importante es la Constitución de los Estados Unidos, quedando todas las demás fuentes subordinadas a esa norma. Ninguna ley o reglamento puede contradecir lo dispuesto por la Constitución de los Estados Unidos y, por ejemplo, si el Congreso ratificase una ley cuyo contenido estuviese reñido con la Constitución, la Corte Suprema puede establecer que dicha ley es inconstitucional y declararla nula.
Sin embargo, una ley no desaparece automáticamente por el simple hecho de haber sido declarado inconstitucional, sino que debe ser derogado por una ley posterior. Muchas leyes federales y estatales han permanecido oficialmente vigentes durante décadas después de haber sido dictaminadas como inconstitucionales. Sin embargo, y por el principio de stare decisis, ningún tribunal aplica una ley inconstitucional, y la decisión de cualquier corte que lo hiciese sería revertida por la Corte Suprema. Igualmente, un tribunal que se niegue a aplicar una norma considerada anteriormente como constitucional, por considerarla contraria a la carta magna, se estaría enfrentando a una posible reversión de su sentencia por la Corte Suprema.2
EL COMMON LAW AMERICANO
Los Estados Unidos y la mayoría de los países de la Mancomunidad Británica de Naciones son herederos de la tradición del Common Law procedente del Derecho inglés; por ejemplo, las cortes estadounidenses han heredado el principio de stare decisis.
El Derecho inglés fue introducido en el Derecho de los Estados Unidos a través de diversas vías: la primera consiste en que todos los estados de los Estados Unidos, a excepción de Luisiana, promulgaron leyes de "recepción" del Derecho inglés, en las cuales normalmente se establecía que el Common Law de Inglaterra (y en especial el proveniente de la jurisprudencia) sería la ley del estado siempre que no fuese contraria a las leyes locales o a las condiciones indígenas. Algunas de dichas leyes establecen una fecha concreta para la entrada en vigor del Derecho inglés en la zona (por ejemplo, la fecha de fundación de la colonia), mientras que otras son deliberadamente vagas en ese sentido.5 Por todo ello, los tribunales contemporáneos de los Estados Unidos a menudo citan casos previos a la Revolución de Independencia cuando discuten la evolución de un antiguo principio de Common Law, como por ejemplo ocurrió con el incremento histórico de la responsabilidad impuesta al transportista sobre los bienes transportados.
La segunda vía de recepción del Derecho inglés consiste en que algunas leyes británicas que estaban en vigor durante la época de la revolución fueron promulgadas de una forma casi idéntica en los estados estadounidenses. Se puede citar, por ejemplo, el caso de la Ley de Fraudes (“Statute of Frauds”). La cuestión es que estas leyes todavía se citan en casos contemporáneos que tratan de interpretar las leyes posteriores que han se han ido desarrollando a partir de éstas.
En cualquier caso, es importante tener en cuenta que a pesar de las leyes de recepción, gran parte del Derecho contemporáneo de los Estados Unidos ha ido divergiendo de forma significativa del Common Law británico. La razón es que a pesar de que los tribunales de las naciones de la Commonwealth se vean influenciados a menudo por las decisiones de los demás tribunales, los tribunales de los Estados Unidos raramente siguen las decisiones tomadas en otros lugares de la Commonwealth salvo que no exista una decisión estadounidense relevante, y siempre que los hechos y la ley aplicable a la cuestión sean casi idénticos, y los argumentos sean muy persuasivos.
Los casos estadounidenses más antiguos, incluso después de la Revolución, citaron a menudo casos británicos contemporáneos. Sin embargo, ese tipo de citaciones poco a poco fueron desapareciendo durante el siglo XIX debido a que los tribunales estadounidenses comenzaron a publicar sus propias decisiones. Los congresistas y jueces, hasta entonces, utilizaron la jurisprudencia inglesa como fuente a través de la cual integrar las lagunas jurídicas. Gradualmente este tipo de apelaciones al Derecho inglés fueron desapareciendo, a medida que las cortes estadounidenses desarrollaban sus propios principios de resolución de conflictos legales. El número de volúmenes sobre jurisprudencia de los Estados Unidos se disparó desde unos dieciocho en 1810 hasta más de 8.000 en 1910. Hoy en día, y en palabras del profesor de Derecho de Stanford, Lawrence Friedman, "la jurisprudencia estadounidense raramente cita materiales foráneos. Las Cortes ocasionalmente citan uno o dos clásicos británicos, algún famoso y antiguo caso o alguna mención a Blackstone, pero la actual ley británcia casi nunca recibe ninguna mención."
Algunos defensores del originalismo y del constitucionalismo estricto, como el juez de la Corte Suprema de los Estados UnidosAntonin Scalia, sostienen que las cortes estadounidense nunca deben buscar soluciones para los casos que se les presentan a través de los casos post-revolucionarios de sistemas legales externos de los Estados Unidos, a pesar de que los argumentos esgrimidos sean persuasivos, con la única excepción de los casos que interpretan tratados internacionales a los que Estados Unidos se hayan adherido. Esta postura deriva inevitablemente de la filosofía del originalismo, que postula no sólo que la Constitución es la última fuente de la autoridad jurídica en los Estados Unidos, sino también que el único análisis válido del documento consiste en averiguar el sentido original del documento en el momento de su creación. Por lo tanto, las discusiones sobre el Derecho británico posterior a la Constitución es irrelevante, puesto que no arroja ninguna luz sobre el significado original de la Constitución. Otros juristas, como los jueces Anthony Kennedy o Stephen Breyer, no están de acuerdo con este punto de vista y citan leyes extranjeras de vez en cuando, siempre y cuando consideren que el estudio de dichas leyes ofrece información relevante y sus argumentos sean persuasivos, útiles o provechosos. En cualquier caso, los precedentes extranjeros nunca se citan como precedentes vinculantes, sino como un reflejo de los valores compartidos entre las civilizaciones anglosajonas u occidentales.13
DERECHO FEDERAL
El Derecho federal de los Estados Unidos se origina a partir de la Constitución, que es la norma que le da al Congreso el poder de promulgar leyes para regular una serie de cuestiones, como por ejemplo el comercio interestatal. Casi todas las leyes promulgadas estatutos han sido codificadas en el Código de los Estados Unidos. Además, muchas de las leyes promulgadas por el Congreso otorgan a las agencias del poder ejecutivo el poder de crear reglamentos que se publican en el Código de Reglamentos Federales y que también obligatoriedad en virtud de la doctrina Chevron. Por otro lado, muchos litigios versan sobre la interpretación de una ley federal o de un reglamento, y las interpretaciones judiciales sobre esas cuestiones tienen peso legal bajo el principio de stare decisis.
En sus comienzos, las leyes federales se enfocaban en cuestiones sobre las que existía una expresa cesión de competencia sobre el gobierno federal en virtud de la Constitución, como en defensa nacionalpolítica monetaria, asuntos exteriores (especialmente , tratados internacionales), arancelespropiedad intelectual (en especial, patentes y derechos de autor), y el servicio de correos. Sin embargo, desde comienzos del siglo XX, una interpretación agresiva sobre las cláusulas de la Constitución relativas al comercio y al gasto público han permitido que la ley federal se expanda a áreas como aviacióntelecomunicacionesferrocarriles, el sector farmacéuticoDerecho de la competencia o marcas comerciales. En algunas áreas, como el ferrocarril o la aviación, el gobierno federal ha regulado de forma tan extensiva la materia que ha impedido virtualmente cualquier acceso de la ley estatal, mientras que en otras, como por ejemplo el Derecho de familia, existe un relativamente pequeño número de leyes federales (que generalmente cubren situaciones que abarcan a varios estados o el extranjero) que interactúan con un mayor número de normas de carácter estatal. En áreas como el Derehco de la competencia o las marcas comerciales coexisten poderosos cuerpos normativos tanto a nivel federal como estatal.

DERECHO ESTATAL
Los cincuenta estados norteamericanos cuentan con soberanías independientes dotadas de sus propias constituciones estatales y sus propios gobiernos estatales. Retienen poderes plenarios para promulgar leyes relacionadas con cualquier materia que no se encuentre expresamente supeditada a la competencia federal por la Constitución federal, las leyes federales o los tratados internacionales ratificados por el senado federal. El Derecho de casi todos los estados federados comparte la misma base del Common Law, con la notable excepción del estado de Luisiana, que se basa en el Código Napoleónico de Francia, y siempre ha sido influido por él. Por otro lado, el transcurso del tiempo ha llevado a que los tribunales y legislaciones hayan ido evolucionando de forma independiente, modificando el Common Law inicial. Como resultado, las leyes de cualquier estado federado pueden diferir en gran medida de la de cualquier otro estado de la Unión.
Por otro lado, muchos estados norteamericanos han codificado parte o toda su normativa legal en códigos de leyes. La codificación es una idea recibida en Estados Unidos desde los países con sistemas de Derecho continental gracias a los esfuerzos del abogado norteamericano David Dudley Field.
Los códigos de Nueva York se conocen como "Laws" (Leyes); en California y Texas se llaman "Codes" (Códigos) y la mayoría de los otros estados usan términos como "Revised Statutes" (Estatutos Revisados o Leyes Revisadas) o "Compiled Statutes" (Estatutos Compilados o Leyes Compiladas) para hacer referencia a sus códigos. California, Nueva York, y Texas tienen códigos distintos para diferentes temas, mientras que los otros estados y el gobierno federal usan un solo código dividido en títulos numerados.
En algunos estados, la codificación a menudo se trata como un mero resumen del Common Law. Los jueces tienen plena libertad para interpretar los códigos, salvo que la legislación lo impida específicamente. En otros estados, existe una tradición de estricta adherencia al texto de los códigos.
La ventaja de la codificación es que cuando la legislación estatal se acostumbra a escribir nuevas leyes como enmiendas a un código existente, el código normalmente reflejará el sentimiento democrático con respecto al significado de la ley actual, y la normativa aplicable en cada caso será más fácil de conocer.
Por contraste, en las jurisdicciones con estatutos no codificados, como por ejemplo ocurre en el Reino Unido, determinar cómo es la ley actual puede ser un proceso más difícil. Uno tiene que localizar la normativa más antigua del Parlamento, y luego identificar todos los decretos que enmendaron ese decreto, o que lo derogaron. Por ejemplo, cuando el Reino Unido decidió crear una Corte Suprema del Reino Unido, los legisladores tuvieron que identificar todos los decretos que referían a la Cámara de los Lores que todavía estaban en vigor, y luego enmendar todas esas leyes para que hicieran referencia a la Corte Suprema en lugar de a la Cámara de los Lores.

Bibliografía
Escuela_Libre_de_Derecho

RAMA EJECUTIVA DEL PODER PUBLICO DE ESTADOS UNIDOS DE NORTEAMERICA POR VIVIANA MARCELA ESPINEL





RAMA EJECUTIVA DEL PODER PUBLICO DE ESTADOS UNIDOS DE NORTEAMERICA
VIVIANA MARCELA ESPINEL
Es importante empezar a explicar que El presidente de los Estados Unidos de América encabeza la rama o poder EJECUTIVO del gobierno estaunidense. El poder EJECUTIVO está formado por el presidente, vice-presidente y jefes del gabinete(consejeros).
El presidente es el "Comandante Superior"(Commander in Chief)de las fuerzas armadas de los Estados Unidos. Otra importante responsabilidad es la de elegir a los que eventualmente son miembros de la CORTE SUPREMA-una de las ramas o pederes de gobierno de los EE.UU. Los miembros del gabinete lo aconsejan para tomar efectivas decisiones.
El presidente es elegido cada 4 años y puede ser presidente solamente dos veces. Las elecciones ocurren en el mes de noviembre cada 4 años y en el siguiente mes de enero, el nuevo presidente inaugura su presidencia.
La rama ejecutiva del gobierno comprende 14 departamentos: Estado, Tesoro, Defensa, Justicia, Interior, Agricultura, Comercio, Trabajo, Salud y Servicios Sociales, Educación, Vivienda y Desarrollo Urbano, Transporte, Energía y Asuntos de Excombatientes. El presidente no supervisa directamente algunas agencias gubernamentales que actúan de forma independiente, como la Comisión de Comercio Interestatal, la Comisión Federal de Comunicaciones y el Sistema de la Reserva Federal. "Estados Unidos de América,"
La ley suprema del país es la Constitución de Estados Unidos. Redactada en 1787, fue ratificada en 1788 por dos tercios de los estados y entró en vigor en 1789. La Constitución se puede enmendar por una votación de dos tercios de cada cámara del Congreso o por una convención nacional especial convocada al efecto, y ratificada después por el voto de tres cuartos de la cámara legislativa de los estados o las convenciones estatales. Las primeras 10 enmiendas (conocidas como Declaración de Derechos) fueron adoptadas en 1791 y garantizan la libertad de expresión, de religión, de prensa, el derecho de reunión, el derecho de presentar demandas al gobierno y varios derechos individuales sobre aspectos procesales y de procedimientos criminales. Entre 1795 y 1992, se adoptaron 17 enmiendas adicionales que, entre otras medidas, abolían la esclavitud y estipulaban el sufragio universal para los mayores de 18 años.
La elección del presidente y el vicepresidente es indirecta. El artículo segundo de la Constitución estipula el nombramiento de ambos por el Colegio Electoral, cuyos integrantes son elegidos por los votantes de cada estado y del Distrito de Columbia. En casi todos los casos, la elección del Colegio Electoral coincide con la expresada por el voto popular. El mandato es de cuatro años y la enmienda 22 (1951) limita el cargo presidencial a dos mandatos. El presidente de Estados Unidos suele tener más funciones que el primer ministro de los gobiernos parlamentarios porque es la máxima representación del Estado y jefe de gobierno; también dirige su partido, tiene importantes capacidades legislativas y preside el ejecutivo.
La Constitución hace al presidente comandante en jefe de las Fuerzas Armadas estadounidenses, y le permite ordenar la entrada en combate de éstas. Pero es el Congreso el que regula la autoridad del presidente para desplegar las fuerzas a iniciativa propia.
Los poderes diplomáticos del presidente engloban la negociación y ratificación de los tratados, con el consentimiento de dos tercios del Senado; la elección de embajadores (también con el consentimiento del Senado) y la recepción de embajadores extranjeros. Puede negociar, bajo su autoridad, acuerdos diplomáticos con los dirigentes de otras naciones. Según la ley, el presidente prepara un presupuesto de gobierno y un informe económico que son remitidos al Congreso cada año, tiene potestad para proponer leyes, en especial respecto a la fiscalidad y otras materias económicas y militares, y también ejerce autoridad gubernamental sobre diversos departamentos y agencias estatales.
Un amplio sistema consultivo está al servicio del presidente; los ayudantes de la Casa Blanca le proporcionan informes, organizan las relaciones con la prensa, los encuentros y los viajes, y se encargan de mantener contactos con el Congreso, los departamentos gubernamentales, grupos sociales y con el partido político del presidente. Las agencias encargadas de estas funciones son la Oficina de Gestión y Presupuesto, que prepara las demandas del presupuesto presidencial y los controles del gasto, el Consejo de Seguridad Nuclear, que se preocupa de la defensa de la nación, y el Consejo de Asesores Económicos. El gabinete del presidente también sirve como fuente de información y asesoramiento. Consta de los jefes de los departamentos gubernamentales y unos pocos funcionarios, como el director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y el embajador estadounidense en Naciones Unidas (ONU). El gabinete no tiene poder en sí mismo.
El Presidente puede vetar la legislación promulgada por el Congreso; puede ser censurado por una mayoría de la Cámara de Representantes y cesado de sus funciones por una supermayoría de dos tercios en el Senado por "traición, cohecho, u otros grandes crímenes o desmanes." El presidente no puede disolver el Congreso ni convocar elecciones especiales, pero tiene la facultad de indultar a criminales convictos de delitos federales (aunque no de crímenes contra un Estado), promulgar órdenes ejecutivas, y, con el consentimiento del Senado designar jueces de la Corte Suprema y jueces federales.
El Vicepresidente de los Estados Unidos es el segundo más alto cargo del ejecutivo del gobierno. Como primero en la línea de sucesión al Presidente, el Vicepresidente accede a Presidente de los Estados Unidos (lo que ha sucedido nueve veces) al fallecimiento, dimisión o destitución del Presidente. Su único otro deber constitucional es servir al Presidente del Senado y desempatar votaciones en esa Cámara, pero, con el transcurso de los años la oficina del Vicepresidente ha pasado a ser un consejero senior del Presidente.